Bizcocho marmolado

La receta base que utilicé para hacer este bizcocho la hago desde hace muchos años. Al añadir la mantequilla sin derretir, le deja un sabor muy rico. La textura es compacta y muy agradable. Para que tenga el aspecto marmolado y sabor a chocolate, sólo hay que repartir la masa en dos recipientes y, a uno de ellos, añadirle un poco de cacao en polvo.

 

La receta base lleva sólo 2 huevos, pero si queremos hacer el bizcocho más grande, sólo tenemos que multiplicar las cantidades partiendo de la cantidad de huevos que le queramos poner y aumentar el tiempo de cocción, disminuyendo un poco la temperatura.

INGREDIENTES:

2 huevos

150 gramos de harina de trigo

100 gramos de azúcar blanquilla (granulada)

100 gramos de mantequilla sin sal a temperatura ambiente

4 cucharadas de leche (si está a temperatura ambiente, mejor)

1 cucharadita de postre de levadura en polvo

1 sobre de vainillina (yo le pongo 1  cucharadita de esencia de vainilla)

Para el bizcocho de chocolate:

1 cucharada de cacao en polvo

1 cucharada de leche

ELABORACIÓN:

Bate la mantequilla con el azúcar con las varillas hasta que esté cremosa. Añade los huevos y la vainilla y mezcla sin batir. Mezcla la harina con la levadura, tamiza e incorpora con movimientos envolventes. Añade la leche y mezcla. Separa la masa en dos mitades y, a una de ellas, añádele una cucharada de cacao en polvo y una de leche y mezcla. 

Unta el molde con mantequilla y enharínalo o fórralo con papel vegetal para hornear. Rellena el molde con las dos masas, alternándolas, para que después quede un dibujo. 

Hornea a 180ºC durante unos 20-30 minutos. Cuando haya crecido por completo y esté dorado, pínchalo con un palillo. Si sale limpio, deja el bizcocho reposar unos minutos dentro del horno y deja después enfriar sobre una rejilla.